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Libre albedrío en Mercedes con Nico y Lewis
17 julio 2014
Este fin de semana se llega a la mitad de temporada en la máxima categoría del mundo, la Formula 1, quedando muy asentado y claro que el equipo dominante es Mercedes con sus pilotos Lewis Hamilton y Nico Rosberg, teniendo una clara ventaja sobre el resto de la parrilla este 2014 y demostrando cada fin de semana quien manda.
Sin embargo dentro del equipo Mercedes ambos pilotos están peleando por el campeonato del mundo, lo cual en cierto punto puede poner en riesgo el campeonato de constructores si ambos pilotos empezarán una pelea campal y no respetan el objetivo principal del equipo, el cual es ser campeones de constructores 2014.
La separación en puntos entre ambos pilotos es minima, solo cuatro unidades en nueve carreras completadas este año, con Nico Rosberg habiendo ganado tres grandes premios y estado en el pódium en la segunda plaza en cinco ocasiones, pero en la última fecha un abandono corto su racha. En cuanto a Lewis Hamilton lleva cinco victorias, dos segundos puestos y dos abandonos.
Dentro de la escudería no existe una orden especial en cuanto a que piloto va adelante o quien deja ganar al otro, se puede decir que existe una política de libertad absoluta entre sus pilotos para que puedan pelear por el titulo, y a secreto de voces se asegura que su afiliado Daimler preferiría ver al alemán coronarse llevándose el campeonato del mundo, dato que nadie puede confirmar hasta la fecha.
Totto Wolff, director del equipo Mercedes y compañía no se han inclinado por ninguno de sus pilotos como firme candidato al Mundial, opción más que positiva para fomentar el espectáculo en la Fórmula 1, pero una vez llegados a este punto, continuar con esta teoría puede volverse en su contra, ha llegado el momento o está cercano en el que Mercedes tenga que decidir si es Nico o Lewis.
Ambos pilotos han mostrado su valía hasta la fecha y cualquiera es digno merecedor de ganar el título mundial, pero históricamente ha llegado el momento de tomar una decisión, ambos pilotos comenzarán a ir al límite más que nunca, por lo que la posibilidad de quedar los dos fuera de carrera aumentará en cada gran premio. La rivalidad es buena, pero en su justa medida, esto según palabras del director de la escudería a una revista italiana.
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