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Alonso se fue en el momento correcto de Ferrari
26 diciembre 2014
El nuevo presidente de la escudería Ferrari F1 Team, Sergio Marchionne, es todo lo opuesto al saliente, Luca di Montezemolo, de este nunca se habría esperado un discurso tan áspero y estricto como el último que se oyó en la fábrica de Maranello, y menos en la comida de Navidad de la escudería: "No quiero hablar del pasado, ya nos han dado demasiadas bofetadas", afirmaba con su estilo directo Marchionne.
"No vale la pena hablar de la temporada 2014, que ha sido un gran desastre para Ferrari y todos los que aman este equipo y sus tradiciones", indico Marchionne, que tampoco quiso buscar eufemismos para lo que viene en 2015. "Debido a decisiones tomadas por otras personas, con las que no tengo por qué estar de acuerdo, vamos a comenzar la nueva temporada muy tarde”.
“El hecho de que se siguiera trabajando en el monoplaza del 2014 no ha tenido impacto en los ideales del proyecto del 2015, para mí, teniendo en cuenta como acabamos, tal vez habría sido mejor actuar de manera diferente. Estamos buscando elementos importantes para la evolución, pero será cuesta arriba”, explico Marchionne.
“Lo único que puedo garantizar es que el equipo tiene un compromiso fenomenal y que tiene todo mi apoyo", valoraba el nuevo mandatario, ataviado con su sempiterno suéter de punto y en tono cercano al enfado. "El coche ha pasado ya el test de choque, pero vamos retrasados sobre lo previsto y no creo que podamos estar a la altura por lo menos al comienzo de la temporada", insistió Marchionne.
No hay mucho más que añadir, si desde el interior de la fábrica italiana se vierten tales palabras. Pero parece evidente que Fernando Alonso ha elegido el momento idóneo para dejar Ferrari, vistas las pobres expectativas que se tienen sobre el rendimiento del coche del próximo año. No eran erradas las informaciones desde Italia, que apuntaban a unos datos iniciales muy pobres del proyecto 666.
Respecto al piloto español y a su sustitución por Sebastian Vettel, Marchionne sólo pudo decir: "No espero menos de un piloto alemán que de uno español, que se deje el alma manejando el coche y que gane grandes premios", concluyo.
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