La piloto española Carmen Jordá se muestra tranquila, esto después de señalar que su vida cambio desde que se integro a la escudería Lotus F1 Team como piloto de desarrollo, en donde para ella, las críticas que ha recibido de diferentes sectores del deporte motor, no solo de sus ex compañeros de la categoría GP 3 Series sino de mujeres ligadas a la FIA como Michele Muton, no es algo anormal.

“Creo que cuando estás en el ojo público, todo mundo va a opinar de ti, tanto bueno como malo”, indico la española en una visita rápida a la Ciudad de México el fin de semana pasado, una ciudad que visita por segunda ocasión en su vida. Para ella, su llegada al equipo Lotus de Formula 1 no ha sido sencilla como todos pensarían: “Es mucho más complicado todo, viajo el doble y ahora mi vida es alrededor de aviones, hoteles y maletas”, comento la española.

“Este año mi trabajo se basa en el simulador y en estar en los grandes premios con el equipo, es un trabajo diferente”, comento Jordá, que por momentos extraña las libertades que tenía en la GP 3 Series, donde si bien su opinión tenía valor, no debía medirse en sus palabras. “Cada cosa que dices, cada entrevista que das en Formula 1 vale mucho más y todo mundo está más al pendiente. Tienes que aprender a vivir de esa forma, pero me gustaría ser un poco más libre para expresar realmente lo que siento”, aseguro.

Por ello, responde ante sus críticos, quienes parecen no conocer el panorama completo. “Puede ser que algunos de ellos, sobre todo los pilotos de la GP 3 Series y ex compañeros de equipo, los cuales estén celosos de mi posición, o tal vez no, ahora mismo no estoy en la parrilla de la Formula 1, soy piloto de desarrollo de Lotus, pero ya veremos en el futuro”, indico la española residente de la Cuidad de Valencia, España.

Carmen no niega que siente envidia de Romain Grosjean y Pastor Maldonado, sus compañeros dentro del equipo Lotus, cuando ellos salen del box a la pista. "A mi me gustaría ser quien maneje el coche, eso es obvio, pero ahora estoy centrada en mi posición de piloto de desarrollo, en donde todo ha sido todo un poco progresivo en el simulador. Me costó mucho ser constante en el mismo, porque a pesar de transmitir una sensación más real no deja de ser una simulación, así que tienes que adaptar tu cerebro para que capte que estás en movimiento y a la vez que estás parado, al principio cometí muchos errores porque no calculaba", concluyo Jordá.