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Michelin sigue interesado en regresar a la F1
6 febrero 2016
Hay que remontarse al inolvidable Gran Premio de Indianápolis de la temporada 2005 para entender la salida de Michelin de la Formula 1, en donde el accidente del piloto alemán Ralph Schumacher en la curva número 13 de la pista estadounidense y las quejas de varios pilotos confirmaron que los equipos que montaban neumáticos de la marca francesa estaban corriendo peligro al paso por ese tramo del trazado.
Lo que pasó después forma parte de la historia negra de la competición, en donde escuderías y proveedor exigieron una modificación de la curva a los responsables del evento, sin embargo la organización no atendió los ruegos y los afectados convinieron entrar a boxes tras la vuelta de reconocimiento y no disputar la carrera, en donde el resultado fue un monumental cabreo de Ecclestone y pérdidas millonarias de la firma en compensaciones a los espectadores.
Los franceses sólo aguantaron una temporada más en el gran circo, dejando en la temporada 2007 a Bridgestone como único proveedor de neumáticos de la máxima categoría del deporte motor. Años más tarde Michelín intentó volver, pero Ecclestone, quién sabe si por el amargo recuerdo, optó por continuar con Pirelli hasta al menos la campaña del 2019.
Aun así Pascal Couasnon, director de la sección deportiva de la marca Michelin, no tira la toalla, comentando al respecto: "Todavía seguimos interesados en la Formula 1", explica el directivo. Una cuestión de tamaño, el cual es el único impedimento para un posible retorno, a parte de la negativa de Bernie, está en el actual tamaño de las llantas, algo que no termina de convencer a Michelín: "Sabemos que algún día esto tendrá que cambiar, si la idea es transmitir tecnología del circuito a la calle, los monoplazas tendrían que ser más similares a un coche normal", indico Couasnon.
"Buscamos demostrar nuestros conocimientos en una competición que mezcla espectáculo y tecnología, pero pensamos que las llantas deberían medir 18 pulgadas. Esta modificación es barata, y haría que los coches fuesen un segundo y medio más rápidos, además de que nuestros neumáticos son más baratos que los del resto de competidores", finalizo el directivo de Michelin.
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